domingo, 23 de marzo de 2003

Pimené


Pimené (2801 m) cara Norte clásica (II/AD inf). Valle de Gavarnie, Pirineos





















La segunda (y última, casi seguro) salida anual con mendiak eta herriak, de alta montaña invernal. Una experiencia que hacía tiempo quería probar, y de las que he salido muy satisfecho. Espero repetir el proximo año.

dificultad, carácter: La pared impone una aproximación desde el valle de Gavarnie (antes de llegar a Gavarnie) bastante abrupta y realmente directa. Vía de mixto (entrada, II), 50º máx., poco mantenida. 

grupo: Abel Abarrategi, Iñaki Zuza (guía A.M.) y yo. 
fecha: domingo 23 de marzo de 2003. 
meteo: frío en esta altura, despejado. 
foto: Sensia 200 en la Nikon F70; CD. 
m+: cascada/s en la aproximación; v.n. desde Gavarnie con la cuadrilla... 

route: Granja 1km. antes de Gavarnie (1305 m)-Cima (2801) m-Base (1305 m).
desnivel: 1.500 m de subida total hasta la cima. 
tiempos: 7.20 cb, 13.15 cima, 16.20 cb. 6h en total. 

Tras dormir bien a gusto en Gedre, partimos, no tan temprano como me hubiera gustado, a encontrar le entrada adecuada en el valle de Gavarnie que nos permita superar las abruptas laderas del mismo y alcanzar las partes altas que dan acceso a la Norte del Pimené. Clásica del valle, obviamente es mucho menos conocida y frecuentada que otros itinerarios de gran renombre (Swan, Circo, Torre, Marboré, Nortes Taillón, etc.). Desde una pequeña granja, la aproximación es algo salvaje hasta encontar una pista que lleva a unas bordas. 

Antes de llegar a estas, superamos un gran zócalo, rudo, que deja paso a unas ptes. de nieve que acceden a pendientes suaves (cascada accesible y no difícil). Ahora hacia la derecha (dirección Sur), vamos en en busca de ver aparecer la Vertiente Norte del Pimené. La Cara Norte es amplia, y se puede atacar por diferentes sitios, todo depende de nosotros y de las condiciones. La entrada es mixta, y arañamos los crampones hasta la primera reunión. Después, tras ptes. algo empinadas, se tumba otra vez hasta las ptes. finales hacia la drcha., en busca del canal final que sale directo a cumbre. 

En la cima las vistas son absolutamente espectaculares, y mis fotos pueden dar una idea de ello. Todo el Circo de Gavarnie, Nortes de Taillón, Astazous, Marboré, Monte Perdido, etc., dan a este pico un carácter increíble. Sin duda uno de los mejores vigías de todo el Pirineo. El descenso, por pendientes de la vertiente NO, es expeditivo, dado lo elevado del ratio desnivel/kms. recorridos. La vuelta a casa es lenta, pero al menos segura. Maná sigue sonando todo el trayecto, qué pesadilla. Llego a Amara tarde, pero muy contento y satisfecho. El invierno que viene, con Eider, será más tranquilito. 

Donostia, 1 de marzo de 2004

sábado, 22 de marzo de 2003

Taillon couloir de Gauche



 

























Taillon (3144 m) cara Oeste-couloir de Gauche (III/D). Gavarnie, Pirineos

El pico Taillón es un gran pico que además ofrece un excelente terreno para el juego alpinístico. Su normal es una de las más fáciles de los tresmiles pirenaicos, ascendido por multitud de montañeros durante la teporada. Su Cara Norte es codiciada como una de las más bonitasy es una de las grandes clásicas del arco. Su amplia Cara Oeste, frente al Gabietou Oriental, presenta una arista (la NO) de dificultad clásica, y tres corredores-goulottes de variada dificultad y longitud. 

Toda vez que la Norte ya la hicimos con Ioseba, mi objetivo como salida guiada era el corredor que observé en el decsenso de la misma, mientras atravesaba el Glaciar de Gabietou: El couloir de Gauche, con una preciosa cascada de hielo al inicio de las “hostilidades”.  

dificultad, carácter: 350 m, la mitad de la Norte en desnivel. Aproximación más larga, aunque fácil; descenso sencillo. Técnicamente comporta una cascada de unos 20 m con pasajes de 70º en buen hielo. Nieve entre 45-55º; paso mixto M2 en la barrera rocosa superior. 

grupo: Abel Abarrategi, Iñaki Zuza (guía A.M.) y yo. 

fecha: sábado 22 de marzo de 2003. 

meteo: tiempo algo inestable con viento Sur, frío en esta altura, y nubes altas. 

foto: Sensia 200 en la Nikon F70; las pasaré a CD, como la de la GD. 

m+: Goulotte central, de alta dificultad (2 cascadas de entidad). 

route: St. ski Gavarnie (1650 m)-collado Bujaruelo (2270 m)-Cara Oeste-Taillon-St. ski Gavarnie. 

desnivel: 1500 m de subida total, desde el Parking, hasta la cima. 

tiempos: st. ski 6.15h, cima 12.00h, st.ski 16.15h; total 10 horas ida y vuelta. 

material (ataque): botas dobles Asolo, crampones Grivel-2F, peto SalewaPowerTex, mallas térmicas TNF, forro polar fino TNF, chaqueta Mountain-Jacket TNF, piolets Ch.Moser y Grivel-Rambo. Casco y guantes Ch. Moser de lana. 3 tornillos de hielo para la cascada. 

reporte

Salimos temprano aunque podríamos haber madrugado más. Abel Abarrategi, Zuza y yo formamos la cordada. La aprox. a la vía es larga y se hace cansa, ya que hay que superar el zócalo del glaciar de Gabietou. En 3 largos superamos el cono y cascadas de entrada, es técnico y bonito. La cascada es para entrarle con buena técnica; no es larga pero llegará casi a los 80º en algún tramo. 

La segunda parte del la goulotte es un couloir de 45-50º en buena nieve, que pone a prueba los gemelos. Me pongo a prueba, subiendo acompasadamente entre el guía y mi compañero, quien llevaba una cámara digital. En la cima del Taillón esperamos en una zanja cavada a los compañeros que han hecho la Norte clásica, entre ellos Juanan. El descenso lo realizamos sin novedades, por el glaciar del Gabietou. 

Durante largos ratos he observado la Norte del Gabietou, y no he visto nada que me haga pensar en intentarla: La entrada no es evidente, en la parte final aparecen muchas bandas de roca, los seguros deberían ser en nieve, y no es una cara algo cóncava como puede ser la del Taillón. Hay más que perder aquí que ganar, pienso yo. De vuelta al Valle, gran merienda-cena en Gedre, y tremendo vivaco en el parking, junto a un muro y protegido por él. 

Al día siguiente decidimos hacer la Norte del Pimené. Se desecha la posibilidad de hacer el couloir Clé de Curé del Pene Blanque de Troumouse, al que yo le tengo echado el ojo... en la cumbre del Taillón.

Donostia, 1 de marzo de 2004

domingo, 16 de marzo de 2003

Telera



foto publicada en Desnivel :-)


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en el fregado del couloir
Telera con nubes jugetonas


Peña Telera (2764 m) Gran Diagonal (600 m, AD). Sª de Partacua, Valle de Tena, Pirineos

Es la tercera vez que intentamos la Gran Diagonal. En las dos primeras el tiempo (el mal tiempo), nos hizo recular. esta vez ha sido la vencida. La ascensión de esta gran vía clásica nos ha dejado un gran sabor de boca. 

Está plenamente justificada la fama y el haberse convertido en una de las rutas clásicas de invierno del Pirineo Aragonés. La longitud, estética de la ruta, y el marco en el que se desarrolla, son los elementos básicos para que, cuando la encontramos en las condiciones necesarias para disfrutarla, sea una memorable experiencia en la montaña. En el PMG llevábamos varios años tras de ella. Bien, ya la hemos disfrutado, los tres que quedamos “en activo”: A, Al, y yo.

grupo: Al, A y yo.
fecha: 15-16 de marzo de 2003.

Salimos de noche preveyendo una buena mañana y anticipándonos a los acontecimientos (sol, otras cordadas, margen de seguridad, etc.). La noche, gracias a la enorme luna, es bastante clara y a pesar de las nubes circundantes, Al nos anima a desayunar y a salir pitando. La niebla que cubría la Norte se está retirando poco a poco... 

f: Sensia 200 en la Nikon F70; digitalizado en un CD, como las de Águila-Anayet.

m+: Otros corredores interesantes en el macizo: “Elena”, “Maribel”. “Canal Ancha” a Peña Retona, etc.

(día1): parking del Parque Faunístico-vivac 1:30h.

(día2): vivac 4:35h, salida Gran Diagonal 7:50h, cima Peña Telera 8:30h, rápeles de la “Z”, vivac, parking del Parque Faunístico, 13:30h.

desnivel: 1.400m de subida total, desde el Parking, hasta la cima.

tiempos: total 9 horas ida y vuelta, el día del ataque.

material (ataque): botas de cuero Sportiva-Nepal Top, crampones Grivel-2F, pantalón schoeller Salewa rojo, forro polar fino TNF, chaqueta Mountain-Jacket TNF, piolets Ch. Moser y Grivel-Rambo. Casco y guantes Ch. Moser de lana. Una cuerda Beal gemela de 55 m/8.2 mm, y otra auxiliar para los rápeles de 30 m/8 mm.

Salimos a medidía, una vez Al acaba de trabajar en el almacén de R. Nos espera en la calle Easo. Hacemos el viaje de un tirón hasta el Valle de Tena. La meteo para el finde parece que será buena; aunque no tanto como el resto de la semana, que ha sido excepcional. Aparcado el Astra en el parking que han habilitado tanto para el acceso a la Sierra como para visitar el Parque faunístico sobre fauna pirenaica, sondeamos un poco a las cordadas que han bajado a ver cómo están las cosas en los corredores. Los que están cambiándose frente a nosotros han subido el corredor de la vía normal; una cordada al menos ha hecho la GD, y según ellos en buenas condiciones. Esto nos anima; ahora sólo hace falta suerte con el tiempo.

La sudada de rigor no nos la quita nadie: Nuestro plan es sencillo. El ideólogo Al toma el mando de la logística en esta ruta y nos ordena instalar el vivac en el lugar relativamente plano más cercano al cono de entrada a la GD. Dormimos en la “Vaude”, y atacamos con el piolet en la boca, calculando la llegada al resalte a la hora del amanecer. Todo se desarrolla bajo el plan, lo que pasa que para darle 
más emoción, las nubes e incluso la lluvia hacen acto de aparición. Al se desespera porque no admite una tercera retirada. 

Mis sentimientos, por contra, son enfrentados. Por un lado, evidentemente quiero hacer la ruta y disfrutar la vía con mis amigos. Por otro lado, pienso en Beatriz que, por dos fines de semana seguidos, va a estar sola. (El siguiente finde voy a Gavarnie con mendiak eta herriak). Me da respeto la ruta, siempre me ha parecido de envergadura y con más compromiso que otras que hemos realizado anteriormente. El descenso lo efectuaremos por los rápeles de la “Z”, así nos evitamos la tensión del “Paso Horizontal”, muy mitificado, y también el bucle es más claro y sencillo hacia el vivac.

Montado el vivac, frente al couloir, cenamos dentro de la tienda sopa caliente, arroz con alcachofas (!) de la ama de A, pasta con tomate fresco, chorizo de Al... o sea, bien. Dormimos, cada uno lo que puede, esperando intranquilos la hora fatídica de salir del saco, ponerse la botas dobles3 , etc. Las nubes andan pululando, pero se ve que van en retroceso, a medida que pasan las horas. Incluso llovió un poco al rato de meternos al saco. Liderados por Al, nos preparamos, desayunamos algo y empezamos la larga letanía bajo los frontales: Un paso, otro paso, y otro más. Llegar al cono, pasarlo, superar las interminables rampas de 30-35-40º de la parte baja del corredor... Sin duda en este tramo, donde vamos desencordados, es donde peor lo paso, pues mi mente vaga y piensa en negativo, a la par que la oscuridad y el silencio reinantes. Al tira delante con fuerza, y A y yo le seguimos, porque, al fin y al cabo: ¿Qué otra cosa vamos a hacer más que seguirle? ¿A qué hemos venido, sino?

Finalmente, y tras un estrechamiento donde la nieve, muy dura, se pone a casi 55º, llegamos a una reunión (clavo), donde sacamos la cuerda. Tras un rato para aplicarnos en estos menesteres con el material, Al sale, asegurado por A, hacia el estrechamiento, que bordearemos por el corredor de la derecha, por donde sigue la huella. Una tirada muy bella, con un tramos en nieve corcho perfecta al lado de una losa, es el inicio de este tramo, donde la luz del alba se empieza a sentir ya. Saco la cámara y hago alguna foto. Disfrutamos mucho. Al nos lanza algún regalito; el primero de cordada siempre asegura más sus pies que el resto, y es normal que lance más metralla blanca.

Tras una pequeña travesía hacia la izquierda para retomar el eje, sobre el resalte difícil (ligera ojeada de Al: “Me alegro de haber hecho esta variante”), tenemos un tramo en el que vislumbramos ya la travesía expo. que nos acercará al final. Seguimos, cada vez más contentos.

Justo antes de llegar al balcón-travesía (tremendo patio), echamos un vistazo hacia el valle. Disfrutamos de un precioso amanecer, con nubes en el valle, y ese tono rojizo tan prometedor de un día perfecto. 

La sucesión de tramos y la concentración necesaria provocan en nosotros la extraña sensación de “ya se está acabando”, con pena. Hemos disfrutado mucho este corredor, y en esta parte superior, con tan buenas condiciones, solos (los primeros), y en buena forma, tal vez si hubiera seguido 150m más no nos hubiera importado. Un bonito y fácil paso mixto en la salida, y ya podemos sonreir más relajados. El tramo hasta cima se ve fácil (palas de nieve), con lo que mi penúltimo temor se ve dsipado. La remontada hasta cima se hace dura, porque impone un cambio de ritmo en subida. Del ritmo tranquilo y con apoyos sobre los piolets del couloir, ahora andar sin paradas se hace cansino. Tras un tramo empinado en la cresta Este, hollamos la cima de Peña Telera. Apenas son las ocho y media de la mañana, y hace viento y frío. Reponemos fuerzas y recogemos la cuerda.

El descenso se efectúa hacia el Oeste, por palas de nieve. Enseguida se corta la cresta, con un resalte de nieve/roca, que destrepamos hacia el SO. (Un buen tramo con pendientes de 50-55º). Un flanqueo hacia los cortes nos deja en la salida del corredor María José Aller. Ahota nos resta una travesía fácil (huella superhecha) pasando por las salidas de Maribel e “Y”, hasta alcanzar los rápeles del corredor en “Z”. Realizamos 2 rápeles de unos 30-35 m c.u., con ambas cuerdas unidas (55+30 m). Después, decidimos destrepar hasta abajo, pues ya no es necesario rapelar y además la reunión no es tan buena ya. 

Nos cruzamos con una cordada a la que nuestros “regalos” les ha hecho descender. Son tres alumnos con un guía que, sin duda, andan algo tarde. El descenso del gran cono de entrada es pesado, dado lo duro de la nieve, que no amortigua nada las pisadas. Además, atravesamos sobre los restos helados de una antigua avalancha.

Tras retornar al emplazamiento del vivac y recoger las cosas, comemos algo, en un bonito mediodía. No nos queda más que bajar hacia el coche saboreando y relamiéndonos por otra gran jornada de montaña.